Defensores de Cambaceres se despidió de su casa en el presente campeonato con una nueva y dolorosa derrota ante Sacachispas donde el equipo mostró la peor cara de todo el campeonato.
Desde el plantel se escuchó una fuerte autocrítica, y para poder charlarlo Las Voces del Ascenso (lunes a las 18 hs por FM 90.1) convocó al capitán y máximo referente del equipo, Máximiliano Benítez, quien hizo una pequeña referencia al partido pero que sabe que la mirada del Rojo debe ser para adelante: “Sacachispas no mostró nada. Tuvieron una sola ocasión y se llevaron tres puntos porque se estaban jugando la vida. Nosotros nos la jugábamos por darle un triunfo a la gente, por irnos bien de esta mala campaña y no se pudo dar. Son cosas que no tienen que ocurrir más. Para el que siga acá o para el que venga, hay que replantearse muchas cosas”.
Ante la situación de cada equipo era lógico que se imaginen motivaciones diferentes para cada plantel a la hora del choque del último lunes, cuestión que “Maxi” no dudó en aclarar: “Leí que decían que Cambaceres no jugaba por nada. ¿Cómo? Estás jugando por los tres puntos que es lo más importante y hay que valorarlos partido a partido porque después no hay tiempo para lamentos. No sirve de nada lamentarse por lo que podría haber sucedido”.
Parte de la fuerte autocrítica que hubo en el plantel sale de la boca del capitán del equipo, quien a la hora de hablar de su propio rendimiento no se esconde y señala: “Yo soy el primero en reconocer que hice mal las cosas. No puede ser que un delantero haya hecho sólo tres goles. Hay que hacer mea culpa. Y me voy muy dolido porque no pude hacer ningún gol en Ensenada para dedicárselo a mi familia que es donde están para acompañarme, y ellos son los que realmente sufren cuando las cosas salen mal. Porque cuando las cosas no andan bien no hay amigos, no se acerca nadie; aparecen en otros momentos. Por eso que los amigos están en estos partidos y yo quería hacer un gol para dedicárselo a ellos que están también en las malas”.
Consultado por Las Voces si no se arrepentía de haber vuelto a “Camba” en este momento, Benítez tampoco duda y mientras continúa con la autocrítica remarca: “Las cosas se tienen que hacer con decisión. Cuando me llamaron para venir, que estaba Zuccarelli, yo dije que sí. Muchas veces en el fútbol se dice ‘tal lugar es mi segunda casa’…Cambaceres es mi casa y yo hoy por hoy soy Maxi Benítez en el ascenso gracias a Cambaceres. Obviamente yo ayudé haciendo goles, pero si en el 2000 no me ponían me hubiera pasado como a muchos pibes y yo gracias a Cambaceres jugué en muchos lugares y pude conocer el país. Y siempre estuve al tanto de todo porque pase lo pase uno al club lo quiere. La pregunta no es si era el momento para volver, la pregunta es por qué no le pude dar más a Cambaceres. Yo en cada partido dejo todo y antes hacía los goles hasta en offside, y hoy por hoy tres goles para un delantero es muy poco”.
Como máximo referente de este plantel, también es válida la opinión de “Maxi” sobre la vida institucional del club y lo que puede venir a futuro, tema del club el delantero tiene una idea muy formada y es que “por lo que uno ve se quieren unir todos para sacar el club adelante y eso estaría bueno, que haya una lista única y que tiren todos para el mismo lado. Yo creo que eso se puede dar. La gente hablando se entiende. Yo pienso que todos quieren al club y uniéndose, trabajando y cada uno tratando de aportar donde pueda, se puede salir adelante. Igualmente yo tengo que decir que la gente que está ahora con Curti y Martinetti se mueven mucho y ayudan como pueden, porque no todo es plata, sino que hay que estar”.
Para el cierre, y para sacarle una sonrisa al hincha del Rojo, Maximiliano Benítez deja abierta la ilusión para la vuelta al club de un ídolo y de uno los mejores jugadores que vistieron la camiseta roja de Ensenada. Esa persona es Pablo Casado y el capitán lo cuenta así: “Cuando iba para la cancha estuve hablando con él y lo que he hablado es que se quiere retirar acá. Todos tenemos que hacer el esfuerzo para que venga porque realmente el club lo necesita. Por ahí me mata por dar a conocer esto pero es una realidad que charlamos en la intimidad. El se quiere retirar acá, siempre tiene ganas y yo se lo recuerdo porque si es su segunda casa tiene que venir. No se lo puede discutir como jugador ni como persona pero yo le digo: ‘Dejate de joder, vení a jugar acá que estás a 20 minutos de tu casa’. Pero hay que ver si lo quieren o no pero ojala que se de. Y eso que por ahí yo me voy en junio, pero se lo quiere tanto al club porque se vivieron muchas cosas, alegrías y sufrimientos. Pero uno aprende a quererlo al club y siempre le va a estar agradecido y lo que duele es no haberle podido retribuir al club todo lo que hizo por mi”.
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