En el primer tiempo la pasaba mal porque J.J Urquiza arranzó más despierto y lo ganaba con el gol de Batarás. Pudo aumentar el local pero le dejó vida a Camba, y en el segundo tiempo llegó una vez más la reacción de un conjunto que nunca se da por vencido. A través del gol de Yañiz, y de una notable levantada colectiva, casi se trae los tres puntos a Ensenada, y más allá del empate, volvió a dejar una imagen firme y esperanzadora. Ahora se viene Barracas, que ya sabe a que atenerse.
Una etapa para cada uno, un gol en cada etapa que les perteneció. Y un montón de situaciones que pudieron haber inclinado la balanza para un lado u otro. El empate redondeó bien lo que fue este encuentro entretenido y dinámico entre Defensores de Cambaceres y Justo José de Urquiza, en la cancha de Loma Hermosa. El Rojo arrancó algo dormido, y casi lo paga caro, en un primer tiempo en el que el equipo celeste lo ganó 1 a 0 pero pudo aumentar la ventaja varias veces.
El gol en el arranque fue tan sencillo como rápido.Pelota desde el fondo, Valinoti que habilita meritoriamente a Batarás, y el goleador que no perdona a Zurlo. Por la movilidad de sus delanteros, y por ganar casi todos los rebotes, Jota Jota hizo méritos como para llevarse la ventaja parcial. Tuvo por lo menos tres chances certeras de gol. Una más de Batarás, otra de Bogado (de buen primer tiempo), y una del central Sandoval, que conjuró Zurlo. Pero lo perdonó. Y si a Camba le dan vida…
En el complemento llegó el carácter contestatario de Cambaceres. Ese mismo espíritu que lo mantuvo en pie, y que casi le permite dar vuelta el encuentro. Ya en el comienzo se notó mejor contención en el medio de Benavente y Jones. Y con la contención más cerca de los volantes ofensivos y los delanteros, la cara del arquero Arzamendia empezó a verse más de cerca.
Crecieron también Manes y Catriel por las bandas. Y fue el tiempo para que Ezequiel Yañiz empiece a tener esa regularidad que con su carácter a veces conspira. A los 9 minutos, metió una media vuelta fulminante, después de que el piru Náser lograra un muy buen desborde, y el chico del 5 de Mayo que la clavó en el ángulo superior, para gritarlo bien fuerte. De ahí en más, el Rojo salió con todo a buscar los tres puntos, pero no lo consiguió por la gran actuación del arquero local.
Entraron Cabello y Casanova, para refrescar el ataque y aumentar el volumen de juego. Lo hicieron a medias, porque en las últimas jugadas faltó la precisión para la estocada final, o porque el infalible Arzamendia ahogaba el grito una y otra vez erigiéndose en figura. J.J Urquiza ya no era el del primer tiempo, pero mucho tuvo que ver en eso el adelantamiento de Cambaceres y la concentración para ser un equipo más corto, y más compacto.
En tiempo de descuento pudo ser victoria para cualquiera de los dos. Pero lo que no pudieron en cada etapa no iban a poder en el epílogo. La consecuencia de un partido tan equilibrado como entretenido, ya estaba sentenciada El resultado, los rendimientos cambiantes, y los goles, finalmente se habían puesto de acuerdo.
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