A LA CANCHA

Una espera tan larga como ridícula. Pero este sábado a las 15:30 hs se terminará cuando Cambaceres visite a Argentino de Merlo. Si, dejaremos de hablar de pases, ofertas idas y vueltas para hablar de fútbol. Con la esperanza lustrada y reluciente como hace tiempo. Porque volvieron nombres históricos, y por la sangre de los que se quedaron. El pueblo de Ensenada pone una vez más sus expectativas al servicio de un equipo que promete. Y mañana tratará de empezar a cumplir trayendo los 3 puntos de Merlo.
Después de uno de los recesos más largos de la historia, vuelve el fútbol oficial de la Primera C, y el Rojo de Ensenada repleto de ansiedades por demostrar que se preparó y se reforzó bien viajará hasta Merlo para enfrentar a Argentino. Será desde las 15:30 hs con el arbitraje de Sebastián Bresba.

Descartada la posibilidad de que Calderón adelante su debut (será ante el CADU en la fecha que viene nomás);el equipo se perfila de acuerdo a lo que hizo en las prácticas de fútbol con una sola duda; quien acompañará a Maxi Benítez en la delantera. Por ahora Ezequiel Yañiz, que está enchufadísimo corre con una leve ventaja sobre Francisco Ladogana, que también está en muy buen nivel.
Los demás serían los siguientes: Arias Navarro; Calabrese, Ruscitti, Diego Rodríguez, y Oleiro; Násser, Jones, Benavente y Catriel, Yañiz o Ladogana y Maxi Benítez.

De los 11 titulares que van a jugar mañana, 5 por lo menos serán incorporaciones (si juega Ladogana 6). Con la curiosidad de que el mediocampo es la total excepción, compuesto todo por jugadores que ya estaban la temporada pasada. Pero con la novedad de Piru Násser como volante por derecha.

La pregunta más común antes del torneo. ¿Para que objetivo estará este nuevo equipo? Las respuestas empezarán mañana, como siempre en el verde césped; pero a priori, es valioso decir que el plantel creció en dos aspectos: recambio en cada una de las posiciones; y un evidente salto de calidad variantes ofensivas.

La duda? La misma de los últimos torneos; reflejada en el gran desafío de por fin tener una defensa y un arquero sólidos (casi todos nuevos), a favor de liberar y darles tranquilidad a los de arriba; que tarde o temprano deberán desequilibrar.
Si logra eso, que parece sencillo pero no lo es, las ilusiones de pelear bien arriba estarán  fundadas en realidades. A partir de mañana, lo empezaremos a saber.