La primera noticia fue la posibilidad de poder repetir el equipo que le ganó a Defensores de Belgrano el jueves pasado. Con Sommariva y Oroná logrando el complemento ideal en el medio, y repartiéndose mitad del terreno para cada lado, Gonzalo Raverta y Madrid podían dedicarse más a la función ofensiva. Y Sarati y Mirnada tendrán más recursos para que la pelota llegue más redonda. Las intenciones estaban, aunque en el primer tiempo todo haya sido tan trabado que no alcanzaron. Pero mal o bien el equipo se reencontró con un orden que lo respalda par trabajar los encuentros como este contra el gallito.
El primer tiempo fue parejo, con pocas llegadas a los arcos, Se estudiaron demasiado y se cuidaron mucho. Las jugadas de peligro llegaron aisladamente y con remates de largas distancia. Probaron Sommariva y Oroná desde lejos pero sin puntería. A los 23 minutos remata Giarrizo fuera del área débil, y controla Lavallen. A los 27 responde Oroná de lejos pero desviado. A los 29`salva Córdoba después que Lenci la bajara de pecho y se acomodara para rematar. Y en el tramo final Sommariva prueba desde afuera en dos ocasiones pero sin puntería. Fueron los únicos acercamientos a los arcos de dos conjuntos contenidos.
En el segundo tiempo el partido se abrió, Morón con los cambios (ingresos de Echemaite y Martínez) intentó ser mas ofensivo, pero le abrió los caminos a La Villa para llegar con facilidad al arco de Ezquerra, y así la cancha comenzó a inclinarse a favor del celeste. Sarati tuvo un cabezazo y un remate que pasaron muy cerquita. Con el ingreso De Berdún por Sarati, este se fue a jugar de carrilero x izquierda su puesto natural y Madrid pasó a acompañar al Pájaro Miranda en el ataque.
Faltó como viene sucediendo a menudo la puntada final. Porque se generaron varias situaciones. Un cabezazo de Madrid que se lo perdió solo y otra en la que se demoró cuando estaba frente a Ezquerra. Antes, el Gallo había tenido dos chances claras también, un remate de Martínez y uno a quemarropa de Giarrizo que salvó formidablemente.
La cancha estaba rápida y el ingreso de Medina faltando poco parecía que podía beneficiar el ataque, pero la mala puntería en los metros finales volvió a privar al villero de los tres puntos. El “pitu” que hacía mucho tiempo no tenía la oportunidad de jugar, tuvo una opción inmejorable, cuando su compinche Miranda lo dejó solo, y quiso pararla en lugar de empujarla al gol, prácticamente debajo del arco.
En el último minuto San Carlos se lo volvió a perder, cuando el propio Andrés Medina remató cruzado por arriba del arco. Pero las secuencias de las jugadas tenían una misma explicación, el Cele había logrado jugar la mayor parte del segundo tiempo dominando al gallito, más allá de la salvada de Lavallén.
San Carlos tuvo actitud e iniciativa para ir a buscar siempre el triunfo, que no se le dio por falta de resolución. Pero dejó una imagen mucho más sólida y entera que en partidos como Almagro o Los Andes.
No es poco teniendo en cuenta las condiciones con las que tuvo que afrontar este partido, y los dos partidos consecutivos en los que volvió a sumar. Retomó la senda, después de un extravío que parece superado, y con la moral retemplada irá este sábado a Mataderos, para jugar contra Chicago. Ya no hay tiempo para asombros, pudores ni sobreestimaciones. A este equipo le llegó la hora de hacerse “famoso”.
Agradecemos la colaboración a Daniel Alvarez.
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