En la tierra del funebrero, ahí cerquita del cemeterio, Defensores de Cambaceres revivió en el mismo partido en el que le sucedieron tantas cosas, que parecía condenado a perder. Ese, debe ser el mayor mérito de este empate 1 a 1 conseguido frente a Midland. Donde obtener ese punto le costó dos lesiones como la de Jesús Martínez y Martín Zurlo (justo en un buen momento de ambos), y la expulsión por doble amonestación de Calabrese, que justamente había sustituido al lateral izquierdo. Como si fuera poco, el gol de Midland llegó a poco de terminar el primer tiempo, cuando los golpes se asimilan menos.
Fue a través de un penal que cometió el mismo Zurlo y que Arguello transformó en gol en segunda instancia. Lo que nadie podía discutir allí. Ya que Midland, gracias a la propia buena presencia ofensiva del mismo Arguello y Bruno (que casi convierte el segundo por una pifia del golero Rojo), y de una mejor distribución de sus jugadores en la cancha tuvo el predominio en gran lapso del primer tiempo. Camba no alcanzaba a reponerse de una contrariedad que le sucedía otra. Pero además no tuvo la precisión ni el circuito en el medio de otras tardes recientes.
Dos veces antes del gol lo había tenido el equipo de Walter Cataldo, en ambas ocasiones salvó el arquero. Después de eso y del gol iba a llegar la lesión, y la expulsión de Calabrese, que tuvo una tarde para el olvido. El entretiempo lo tuvo a Borgarelli expeditivo, que movió la estantería con el ingreso de Catriel, uno de los mejores proyectos de las inferiores. Con su ingreso, Camba se rearmó en su línea de 3 defensores sobrevivientes, Soria pasó a jugar por uno de los carriles para cubrir la salida de Pesoa, quien otra vez no estuvo en una buena versión, y el pibe de la cantera le dio más dinámica y sobre todo velocidad al ataque.
Con determinación y haciendo caso omiso a los problemas, el Rojo se llevó por delante a un Midland que como todo equipo al que le cuesta ganar, dudó entre buscar el segundo o aguantarlo. En esa duda estuvo el precio del empate. Que llegó a los 30 minutos, mediante un córner, un cabezazo de Kees, las manos de paz, el travesaño y una resolución excelente de Diego Jaime. El delantero “sensación” del equipo, midió tiempos y recursos y no dudó en meter una media chilena que se transformó en el empate definitivo del encuentro.
Pudo no haber sido definitivo si en la última después del deborde del mismo Jaime, Náser lograba capitalizar el triunfo. Pero esta vez el arquero Paz abortó lo que hubiera sido una verdadera hazaña, con uno menos y dando vuelta el pleito. Pero tampoco hubiera sido lo que correspondía en un desarrollo en el que el local tuvo más la iniciativa y algunas chances más de gol. Con atenuantes, es cierto, pero las tuvo.
En el balance el empate fue correcto. En las aspiraciones siempre suma no perder de visitante. Por más que antes del encuentro la realidad proveniente de uno y otro conjunto lo esgrimían a Cambaceres como claro favorito. El punto se valora mucho más positivamente porque nadie tenía en cuenta la cantidad de cosas que le iban a pasar en su excursión a Libertad. Excursión de la cual puede extraerse una conclusión muy real: el camino para alcanzar la cima, no será sencillo. Midland se lo advirtió. Y Camba le contestó con valentía.
Foto: Gabriel de Charras para http://www.revistatribunaroja.blogspot.com/
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