OTRA DERROTA, OTRO TÉCNICO EN LA CUERDA FLOJA

Los hinchas colmaron su paciencia y estallaron contra el técnico Omar Bastía. Es que Cambaceres volvió a perder, de local, contra Argentino de Rosario; pero por sobre todo volvió a decepcionar. Con un esquema compuesto por jugadores que no jugaron en sus puestos verdaderos, y con apenas una mejora en el orden durante el primer tiempo, no alcanzó para nada. Ni siquiera para detener la bronca de los hinchas, que explotaron, y pusieron en jaque la continuidad del todavía flamante “colorado” Bastía.
Un partido solo recordable porque fue el día en el que la gente se hartó de la apatía de su equipo. Sino fuese por ello, difícilmente alguien podrá recordarlo. Muy malo desde donde se lo mire. Desde lo técnico y desde lo emocional. Lo primero porque Cambaceres se dedicó, salvo por el chico Diego Oscar Jaime, a rebolear la pelota y dividirla sin miramientos. Es decir, apostó al azar para que de algun rebote o error de los rosarinos, salga alguna jugada de gol. Lo segundo porque la única nota emotiva de la tarde, fue triste. Un centro más del salaito que el arquerito Sosa erró muy feo en su salida, y dos cabezazos correctivos para que Pons en el final ponga el 1 a 0.
Las únicas ocasiones de gol del Rojo habían sido en el primer tiempo, y en cuenta gotas. Con un par de remates de Diego Oscar Jaime, y con una muy buena habilitación del mismo enganche a Yañiz, para que el rubio la elevar por sobre el horizontal. Pero jugeo poco y nada. Sobre todo porque es muy difícil encontrarlo en un equipo que cambia nombres toda la semana, y lo que es más peligroso, cambia posiciones.
Ezequiel Yañiz de volante por derecha Manes de “5” con Gamberini en el banco. Y Casanova entrando de enganche; son decisiones bastante discutibles. De hecho, esas son las cosas que más se le cuestionan a Bastía. Así como no incluir a referentes como Jones o Diego Matías Jaime en ocasiones donde ellos decían que estaban aptos para hacerlo.
Lo cierto es que entre un tema y el otro Cambaceres jugó un primer tiempo discreto, solo rescatable desde cierto orden defensivo, y un segundo tiempo muy malo. Que Argentino de Rosario no aprovechó antes porque jugó parsimoniosamente, y solo dependía de las apariciones de Gonzalez. Pero aun asi los rosarinos tuvieron el control del juego y del terreno, y el Rojo era puro pelotazo recto, de facil rechazo para los defensas visitantes.
De todas formas era cero a cero que castigaba las impericias de ambos. Y no hubiera cambiado el concepto final, por más que la derrota lo agrave. Porque van 4 partidos de Bastía y la mano positiva del entrenador no aparece. Se viene una semana compleja; con muchas reuniones que desnudarán diferencias en la Comisión Directiva. Entre los que querían que siga Borgarelli y los que votaron por el cambio. Serán horas de largas charlas. Y de decisiones fuertes. Como en los últimos controvertidos tiempos de Cambaceres.