

Esta vez el pedido de suspensión de Gisande (no de Gimnasia club ni de sus hinchas) fue ridículo. Llovió por menos de veinte minutos, 24 horas antes del partido que ya se había reprogramado con Morón, y llamó a la AFA para anular el partido. La ridiculez embarga también un acto cobarde.El presidente de Gimnasia nunca se animó a dar la cara con los dirigentes de San Carlos y decirle lo que, claro está, tiene derecho. Si no quería prestarle más la cancha, hubiera sido mucho mejor decir los porques verdaderos, y sobre todas las cosas, decirlo de frente y con tiempo para que los de Berisso puedan planear una alternativa. Porque un chaparrón de excusa, lo expone al borde de un papelón irreconciliable.
En definitiva, la buena predisposición de Flandria (que fue es justo decirlo la misma que tuvo Gimnasia y no hubiera sido manchada si no fuera por las nimiedades de Gisande), hicieron que La Villa y el Gallito tengan mañana a las 17: 00 hs estadio para jugar.
De fútbol se trata, y respecto a eso, San Carlos no presentará modificaciones. La duda si se jugaba el sábado quedaron despejadas porque tanto el pollo Raverta como Sarati tuvieron tiempo de recuperarse y serán de la partido. El Cele entonces de local en Jáuregui irá con Lavallén, Ochandorena, Slezack, Córdoba y Mauro Raverta, Gonzalo Raverta, Oroná, Sommariva, Madrid, Sarati y Miranda. Se trata deuna nueva posibilidad de ganar por primera vez como local, aunque sea tan lejos y también la de ganar por primera vez dos partidos seguidos. Ojalá se den las dos en una, mediante una victoria nada menos que ante Morón.
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